En un giro significativo para la política migratoria en Texas, el Juez de Distrito David Ezra ha suspendido la controvertida Ley SB 4, marcando un momento crucial en el debate sobre los derechos de los inmigrantes en el estado. La Jueza del condado Harris, Lina Hidalgo, aplaudió esta decisión, destacando las deficiencias y peligros de la SB 4.
“La decisión de hoy es un paso adelante hacia el respeto y la dignidad que merecen todos los inmigrantes en Texas”, expresó Hidalgo. Según ella, la SB 4, lejos de ser una solución, ha exacerbado el perfil racial, la desconfianza hacia la policía, y ha deshumanizado a los inmigrantes, especialmente en comunidades hispanas.
Hidalgo enfatizó la necesidad de una reforma migratoria integral y bipartidista que aborde de manera efectiva los desafíos del sistema de inmigración, priorizando la seguridad y el combate contra los traficantes de personas, sin sacrificar los derechos humanos ni utilizar a los inmigrantes como herramientas políticas.
Por su parte, el Gobernador Greg Abbott anunció que el estado apelará la decisión, defendiendo la SB 4 como una medida necesaria para proteger a Texas de lo que describió como una crisis fronteriza. Esta respuesta subraya la polarización en torno a la política migratoria en el estado y a nivel nacional.
Este episodio resalta la urgencia de dialogar y construir políticas migratorias que concilien la seguridad con el respeto a los derechos humanos, un desafío que sigue siendo central en el debate político estadounidense.