Iván Sánchez quiere revivir el esplendor que una vez tuvo el Distrito J, en el suroeste de Houston, Texas, el cual se fue perdiendo en las últimas cuatro décadas y contribuye a que la ciudad sea una de las más violentas en Estados Unidos.
Originario de Colombia, junto con su familia, abandonó el país a los seis años debido a los cuatro secuestros de su padre, un geofísico, y las amenazas de muerte contra su madre, una abogada que encarceló a varios criminales, para establecerse en Estados Unidos, en donde superaron adversidades idiomáticas, culturales y sociales.
Iván Sánchez anuncia campaña para el Distrito J
Ahora, propone un intensivo plan que incluye: incrementar la seguridad ciudadana y erradicar la violencia, prostitución y tráfico de menores; revitalizar la economía a toda escala mediante la optimización de procesos y el uso de tecnología de punta; reconstruir y mejorar la infraestructura vial y peatonal; además de proteger el medio ambiente, con tecnología solar, arborizando y creando espacios de convivencia ciudadana.
“Mi prioridad es luchar contra los delitos violentos y el tráfico sexual”, plantea el candidato.
De acuerdo con NeighborhoodScout.com, Houston posee una de las más altas tasas de criminalidad en Estados Unidos: 55 por cada mil residentes, en comparación con las comunidades de todos los tamaños, es decir, desde pueblos hasta las ciudades más grandes.
“La probabilidad de convertirse en víctima de delitos violentos o contra la propiedad aquí es de una entre 18. Dentro de Texas, más del 99 % de las comunidades tienen una tasa de criminalidad más baja que la de Houston. De hecho, después de investigar lugares peligrosos para vivir, NeighborhoodScout encontró que Houston es una de las 100 ciudades más peligrosas de EE. UU.”, indicó la entidad.
Una de las principales prioridades de Sánchez es rehabilitar Sharpstown Mall, para ello plantea unir a los sectores público y privado e instalar los principales servicios de la ciudad, como el Departamento de Policía y el de Bomberos.
“Nuestro objetivo es reimaginar este espacio, convirtiéndolo en un centro de innovación, cultura y participación comunitaria”, dijo.
En Houston viven 2 millones 288 mil 250 personas, la mayoría (44.5 %) son hispanos o latinoamericanos, seguido de blancos y afroamericanos, entre otras razas, según la entidad, las cuales están expuestas a la inseguridad que condena Sánchez en su discurso.
Al postularse como representante del Distrito J en el Concejo Municipal de Houston, Iván Sánchez apuesta por recuperar el orgullo del suroeste de la ciudad, que incluye Gulfton y Sharpstown, y fue creado para permitirle a esa comunidad elegir con mayor facilidad a representantes que les atendieran.
Lo medular del plan comienza por reforzar y capacitar a la fuerza policial, particularmente porque dos de los códigos postales son las zonas más violentas. De igual forma, invertir en tecnología para que la seguridad sea verdaderamente eficiente, así como recurrir a la búsqueda de estrategias de prevención, de la mano de las universidades.
Para Sánchez, la prevención de la violencia en los jóvenes es posible mediante la creación de programas para después de recibir clases, la conformación de equipos deportivos y mediante pasantías.
“Durante demasiado tiempo, el suroeste de Houston ha estado descuidado”, sentencia el postulante, que además pretende mejorar la infraestructura y la urbanización del distrito, en especial porque en 2026, la ciudad será un escenario de la Copa Mundial de Fútbol, lo que implicará un flujo de $1.6 mil millones.
Este tema abarca la mejora de la infraestructura vial, peatonal, iluminación, la creación de nuevos parques públicos y la limpieza de drenajes, que eviten graves afectaciones durante la temporada de huracanes.
“Estamos construyendo un Houston que funcione para todos. Para lograrlo, necesitamos una economía fuerte y detener el crimen. Nuestros niños merecen un ambiente seguro, una educación financiada y un futuro lleno de oportunidades”, afirmó.
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