El periodista exiliado Arturo McFields analiza la creciente crisis en Cuba, marcada por constantes apagones y la intensificación de la represión estatal. El gobierno cubano sigue utilizando el “bloqueo” de Estados Unidos como justificación oficial de los problemas energéticos, mientras que McFields destaca que la verdadera causa de los cortes de electricidad radica en la mala gestión interna y la corrupción del régimen.

Según el artículo, las promesas del gobierno de mejorar el suministro eléctrico no se han cumplido. La población sigue enfrentando apagones prolongados, y en paralelo, la represión contra quienes se atreven a criticar al sistema se incrementa, afectando tanto a opositores políticos como a periodistas. Estas acciones buscan silenciar cualquier intento de manifestación o crítica pública.

“El problema no es el falso bloqueo. El régimen cubano maneja toda la economía y la maneja mal. A inicios de este año la inflación era de 30 %, la gasolina aumentó 400 % y la leche es un producto de lujo para la gran mayoría. En solo tres años el dólar pasó de 25 a 325 pesos.”

Aumento de la represión y censura

A medida que los apagones se vuelven más frecuentes, también lo hacen las medidas represivas del gobierno. Las detenciones arbitrarias y el hostigamiento a voces disidentes reflejan el control férreo que el régimen cubano ejerce sobre su ciudadanía. McFields subraya que las justificaciones del “bloqueo” buscan desviar la atención de estos problemas internos, en lugar de asumir la responsabilidad de la gestión gubernamental.

La falta de energía y los constantes cortes de luz no solo afectan la vida diaria de los cubanos, sino que también han debilitado la ya frágil economía del país. Las medidas represivas del régimen agravan la situación, generando un ambiente de mayor inestabilidad y temor entre la población.